En este episodio de Financial Crime Matters, Kieran Beer dialoga con Jessica Davis, veterana con más de 20 años en funciones de defensa e inteligencia en el gobierno y el sector privado de Canadá. Beer y Davis hablan de la ocupación de la capital canadiense durante tres semanas el pasado invierno por el llamado «Resguardo de la Libertad», de los esfuerzos para apoyar al grupo a través del micromecenazgo (crowdfunding en inglés), la criptomoneda y el dinero en efectivo. Así como del éxito del gobierno canadiense en la incautación o congelación de gran parte de esa financiación.
Davis, presidenta de Insight Threat Intelligence y autora de Illicit Money: Financing Terrorism in the Twenty-First Century, habla sobre el uso sin precedentes de la ley de emergencias o Emergency Act de Canadá para desalojar el campamento de resguarda y confiscar su financiación, lo que debería dar inicio a un debate nacional sobre el apoyo financiero a los grupos extremistas.
«Aunque no haya habido tiroteos masivos ni grandes disturbios, se produjeron algunas repercusiones muy significativas que para Canadá y para Ottawa en particular, están realmente fuera del ámbito de lo que consideramos protestas aceptables», afirma Davis, reflexionando sobre los miles de desempleados y los millones de daños como resultado de la ocupación.